Revista de Literatura 86 (172)
ISSN-L: 0034-849X, eISSN: 1988-4192
https://doi.org/10.3989/revliteratura.2024.02.053

Ribao Pereira, Montserrat, (ed.). Relatos decimonónicos sobre el tiempo de Enrique III de Castilla. Berlín: Peter Lang, 2022, 370 pp.

 

En el entramado histórico y literario de nuestra nación, Enrique III, también conocido como «el Doliente», constituye una figura esencial. A pesar de que su breve y apasionado reinado apenas ha dejado rastros en la historiografía por la falta de una crónica base, sus narrativas han sido tratadas exhaustivamente a través de un discurso legendario diverso y complejo que se ha desarrollado desde el siglo XV hasta la era romántica. Con el fin de abordar esta laguna informativa y ahondar en la literatura en torno al tercer Trastámara, Montserrat Ribao Pereira, profesora de la Universidad de Vigo y especialista en Literatura Española de los siglos XVIII y XIX, presenta bajo el título Relatos decimonónicos sobre el tiempo de Enrique III de Castilla una recopilación, edición y estudio de diecisiete relatos de temática enriqueña de diversas tramas e intereses.

El volumen se encabeza con una introducción en la que la autora resalta la trascendencia de este monarca en la literatura de los siglos XVIII y XIX, haciendo especial hincapié en ese vacío historiográfico que permite dar rienda suelta a la imaginación a través de leyendas, historias, crónicas, tradiciones o cuentos. Asimismo, anticipa la diversidad de planteamientos narrativos, géneros, intenciones o historias de los relatos recopilados y explica la clasificación, a mi parecer muy acertada, que hará de los mismos, siguiendo la propuesta de Norman Friedman en Form and Meaning in Fiction (1975). De esta manera, distingue los de trama de pensamiento, los de trama de personaje y los de cambio de fortuna, en los que también se incluyen los de acción.

Un aspecto particularmente encomiable del volumen es la minuciosa explicación que la autora proporciona sobre uno de los episodios más destacables y más recurrentemente reescritos a lo largo de los siglos: la venta del gabán de Enrique III. La riqueza de esta sección es doblemente valiosa, pues no solo se incluye el origen e historia del acontecimiento, sino que Montserrat Ribao remite a diversas conexiones y obras que no ha incluido en su edición, pero que suponen un antecedente fundamental para la creación de los relatos que sí se recogen.

Seguidamente, incluye el estudio de seis de los textos recogidos en el libro que centran su contenido en esta venta del gabán o balandrán. De nuevo, el valor de esta parte reside en el hecho de ir más allá de la mera explicación del contexto y relevancia de la historia, ya que profundiza en el análisis de todos y cada uno de los relatos, comparándolos tanto con los escritos que les sirvieron de base como con los recogidos en esta edición. De igual modo, otro aspecto destacable es la investigación que realiza la autora sobre la verosimilitud de los hechos en los relatos, ya que a través de su ejercicio en el que intenta comprender por qué se incluyen o eliminan ciertos elementos de la historia y con qué intención lo hace el autor en su contexto, nos ofrece un panorama literario e histórico muy completo sobre las diferentes épocas, siempre con Enrique III al fondo. De esta forma, brinda una perspectiva muy esclarecedora que permitirá tener una base sólida para la lectura y que, al mismo tiempo, demuestra su exhaustiva investigación sobre esta temática.

Finaliza esta parte introductoria con el análisis de los restantes once relatos que, alejados del episodio de la venta, narran diferentes historias en las que Enrique III aparece como protagonista o simplemente como un personaje secundario que sirve para contextualizar la historia y reescribirla. Entre estas tramas, se incluyen leyendas ligadas íntimamente a Burgos, como La hechicera de Burgos o El Papa-moscas, además de otras como La torre de Arce, Las Ruinas de Santa Justa, La Torre de la Malmuerta, Manueles y Fajardos o las relacionadas con el trovador gallego Macías.

La segunda parte de este libro se centra en la recopilación y edición moderna de los textos. Como indica la propia autora en el apartado «Esta edición», la selección se ha hecho partiendo de la idea de escoger títulos poco conocidos y sin editar que se han quedado en el olvido entre otros muchos escritos y artículos de prensa. De la misma manera, los relatos se han editado de acuerdo con las normas ortográficas actuales, aunque cabe destacar que se mantienen las peculiaridades propias de cada autor, así como los arcaísmos buscados para ambientar las obras en la época medieval.

Muchos son los aspectos positivos de la selección de textos realizada. Su mérito no solo radica en la recopilación y edición formal de los relatos, además del extenso panorama contextual y teórico que Montserrat Ribao ofrece en la primera parte del volumen, sino que, desde mi punto de vista, la verdadera riqueza del libro se esconde bajo el amplio aparato de notas a pie de página. Estas anotaciones, incluidas en todos y cada uno de los relatos, no solo ayudan a la comprensión de los textos dentro del contexto en el que se insertan, sino que muestran la gran labor de investigación, comparación y contraste de datos que ha hecho la autora para identificar las fuentes y los hechos de los que bebe cada uno de los escritores recogidos. Así, a través de notas que remiten a diversos testimonios históricos, literarios e historiográficos, referenciados al final del tomo, comparte sus indagaciones y análisis para que los lectores y las lectoras puedan acercarse a las posibles intenciones de los textos que, dentro de la diversidad de los relatos de esta publicación, van desde la crítica social y política hasta el uso del humor y la búsqueda de la risa.

Considero que es necesario destacar la sencillez que brinda la autora dentro de la complejidad de la obra, pues no solo ordena los textos por temática para facilitar la comparación y la relación con la teoría expuesta en la primera parte, sino que también adelanta los relatos que requieren de un menor número de anotaciones y referencias para su comprensión y deja hacia al final aquellos que precisan de un mayor detenimiento en esas notas.

A modo de ejemplo, resultan muy interesantes las referencias a otras obras a partir de personajes o temas que se repiten, «Otra hechicera, también de nombre Claudia, protagoniza la novela de Manuel Torrijos El condestable de Castilla […]» (178), así como los apuntes sobre el análisis del contenido, que funcionan como una guía de lectura para poder ahondar en el mensaje e intención del texto, «La alusión a los espectadores confirma la naturaleza teatral de la escena anterior y anticipa el desarrollo mismo de la acción a partir de este momento: Enrique desempeña con maestría su papel de juez ante la corte y de villano ante el receptor del romance» (177). Por último, la riqueza ya expuesta de este aparato de notas se completa con los comentarios y datos historiográficos que se incluyen a raíz de personajes o lugares mencionados y que, en algunos casos, suponen un anacronismo. En esta ocasión, se proporciona información sobre Ruy López Dávalos (172), el ducado de Arjona y su primer duque Fadrique (174), Alfonso de Fonseca (183) o Bribiesca (187), localidad burgalesa mencionada en otras obras como El gabán de don Enrique el Doliente, de Muñoz Maldonado (también recogida en este libro).

Montserrat Ribao ofrece un magnífico volumen para todas las personas interesadas en esta cuestión más allá de los conocimientos previos que posean, en el que investigación y divulgación se unen armoniosamente. Su lectura permite entender mejor la trascendencia, sobre todo literaria, de este monarca y algunas de las diferentes reescrituras decimonónicas que se han realizado a través de variaciones y con diversos fines y propósitos. Aprovéchese la riqueza de esta edición para adentrarnos en las atractivas y diversas historias sobre Enrique III al mismo tiempo que ampliamos nuestros conocimientos sobre el tema de manera muy amena.